La búsqueda de espacios para practicar futbol en una ciudad construida “entre cerros y montañas”, motivó el surgimiento de lo que hoy conocemos como Unidad Deportiva Nieto Piña, una iniciativa ciudadana que se fortaleció al ser donada a la Universidad de Guanajuato (UG), institución que alista la reinauguración de las canchas que dieron origen a su historia.